...Este es el primer agosto, después de algunos años, que no tengo que trabajar, todo un mes de vacaciones sin estar pendiente de Alsas de fin de semana a Luarca, ahora sera un solo viaje de ida y otro de vuelta (eso espero). No concibo unas vacaciones a lo tradicional, es decir, playa + playa = playa; me gusta ir, pero soy mas de chiringuito con unas "cañas", música y el Pais, que de estar como una "cocreta" en la arena o sufriendo el frío y duro golpe de las olas de este nuestro cantabrico. No obstante la playa de Cadavedo tiene la particularidad de tener mas piedra que arena, lo cual aún pareciendo un engorro por la dureza de las piedras, tiene sus comodidades tales como no irte para casa con arena hasta en los bolsillos, y que una vez cogida la posición tumbado sobre las mismas, puede ser hasta bueno para la espalda.
Cadavedo es la playa de mi primera infancia, segunda, adolescencia, y lo que sigue, son muchos recuerdos que tengo en la memoria y que ahora me vienen como si un "dejà viu" se tratase: la "java" de mi madre, la cesta de las tortilas, el Crysler 150 s de mi padre, el galipote de las toallas (si en cadavedo siempre hubo, no solo cuando el prestige). En cadavedo casi se nos ahoga mi hermano el "Perfeutu" bajo una "zodiac" que volco tras un golpe de ola, pero la rapida intervención del "Tío Pepe" hizo que se salvase; también le estoy muy agradecido a mi Tio, cuando me rescato tras haber caído de un puente al rio en Belmonte...
Cadavedo se convirtió en la playa de mis primeros escarceos amorosos, y de amigas y de primas como Erika y Lorena, bueno en realidad solo Erika es mi prima, siempre me llamo la atención, porque nació en Nueva York, y venía de vez en cuando, con ese acento americano y yo le preguntaba: ¿en que piso vives en Nueva York?(pensado que mi prima vivía en un rascascielos como los de las películas).
Cadavedo, además tiene una fiesta (de interés turístico Internacional): "La Regalina o Riegala" es siempre el último domingo de agosto, celebrándose en las inmediaciones del horreo que se ve en la foto adjunta.
Por suerte, Cadavedo se ha librado del plan de ordenación urbana propuesto por el Ayuntamiento de Valdés, aunque la playa ha sufrido algunas reformas de accesos, y de aparcamientos, aún sigue conservando ese aire de playa salvaje, con poca intervención del ser humano, lo cual la hace un cuasi paraíso para mí, espero poder disfrutarla este año otra vez...
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